El gobierno municipal respaldó la preocupación del sector pesquero. "Es un descuido absoluto del recurso argentino y el trabajo marplatense", dijo Fernando Muro, secretario de Desarrollo Productivo. Montenegro dialoga con diputados y senadores para frenar esos puntos de la ley y "defender el laburo".
Las modificaciones que propone la Ley Ómnibus para la actividad pesquera se volvieron el primer punto de choque entre el Gobierno nacional y la gestión del intendente de General Pueyrredon, Guillermo Montenegro, que respaldó la preocupación del sector de la pesca frente a estos cambios, al entender que conlleva “un descuido absoluto del recurso argentino y el trabajo marplatense”.
Los tiempos son voraces. A menos de 20 días de haber asumido y después de la batería de derogaciones en el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), Javier Milei envió al Congreso este conjunto de 664 artículos contemplados en la “Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos”. Inmediatamente el sector pesquero puso el grito en el cielo, y el gobierno municipal no demoró en posicionarse en contra de estos cambios y ya abrió el diálogo con diputados y senadores nacionales para frenar la aprobación de los artículos que atañen a la actividad, al menos tal como están escritos.
En diálogo con LA CAPITAL, el secretario de Desarrollo Local e inversiones, Fernando Muro, respaldó la preocupación expuesta por el sector pesquero y calificó a las modificaciones como “un descuido absoluto” y, en algunos casos, “un despropósito” que “afecta al trabajo de los marplatenses”.
“Vimos lo que esgrime el proyecto de Ley Ómnibus respecto a la actividad pesquera y la verdad es que hay preocupación en el sector. Desde el municipio también vemos que hay cuestiones que nos parecen que no están bien. No nos ponemos desde el punto de vista técnico a ver si es legal o no, pero sí tenemos en claro que vamos a defender el trabajo marplatense, independientemente de quién sea presidente, y vemos que esto afecta el trabajo”, dijo el funcionario.
Las modificaciones en torno a los permisos y las cuotas de pesca cayeron mal en el municipio, como así también el hecho de que empresas nacionales puedan licitar el recurso nacional por sobre las empresas pesqueras. A su vez, generó malestar que ni el gobierno nacional ni los actores productivos de Mar del Plata, el puerto pesquero más importante del país, hayan sido consultados por el equipo de Milei.
“Estos puntos creemos que no están bien y entendemos que conllevan un riesgo muy alto que afecta el trabajo de los marplatenses”, dijo Muro y señaló que, concretamente, esas modificaciones generarían un perjuicio para la actividad pesquera en general, y para “los fileteros, transportistas de pescado y las tripulaciones” en particular.
A su vez, “las desregulaciones de las tripulaciones extranjeras es algo que tampoco está bien”, marcó el secretario de Desarrollo Local e inversiones, quien luego marcó: “Que se den licitaciones internacionales a grupos internacionales para que vengan a pescar al mar argentino y se lleven producto que ni siquiera toquen tierra, es algo que afecta a la actividad”.
Para el Ejecutivo municipal, directamente algunas modificaciones para la pesca propuestas en la Ley Ómnibus “son un despropósito”. En ese sentido, Muro sostuvo: “No sabemos cuál va a ser la autoridad del subsecretario nacional de pesca, porque ni siquiera está nombrado, y esto ya habla de sus atribuciones. Hay cuestiones que están descolgadas de lo que es la realidad”.
“Nos parece un descuido absoluto del recurso pesquero argentino y el trabajo marplatense”, dijo el funcionario y enseguida destacó: “Nosotros vamos a estar siempre defendiendo el laburo, con lo cual nos van a ver en esta instancia al frente de esa defensa”.
El propio intendente Guillermo Montenegro e integrantes de su gestión ya comenzaron a dialogar con integrantes de distintos bloques de diputados y senadores, advirtiendo el desacuerdo con los cambios propuestos para el sector pesquero.
“Con Montenegro ya lo hablamos en el equipo y estamos para dar la pelea y defender el laburo de los maplatenses”, sostuvo el secretario de Desarrollo Local e inversiones de la Comuna.
“Primero esto tiene que tomar trámite legislativo, pero ya está habiendo diálogos y reuniones con diferentes bloques para plantear esta situación. El intendente está hablando con diputados y senadores, está al frente de esto, porque vemos lo contraproducente que puede ser si esta norma se sanciona de la manera que está escrita”, planteó Muro.
Fernando Rivera, presidente de CAIPA (Cámara de la Industria Pesquera Argentina) manifestó que hay una “profunda preocupación” del sector pesquero ante el proyecto de “Ley Ómnibus” que elevó el Ejecutivo Nacional. “Lamentablemente tenemos conocimiento por lo que se dio a conocer, pero nunca fuimos consultados sobre este proyecto”, aseguró.
En el gobierno municipal también causó malestar ese punto. “Esto no ha sido consultado al sector pesquero ni a las ciudades y sus autoridades. Ni Mar del Plata, que es el principal puerto pesquero, ni la zona sur del país, que también tienen una industria pesquera muy fuerte, han sido consultados. Ni el sector productivo, ni los sindicatos ni las autoridades locales han sido tenidas en cuenta para esto”, expuso Muro.
En el inicio de este primer punto de choque entre el Gobierno nacional y la gestión de Guillermo Montenegro, el municipio se para en una premisa: la defensa del “laburo” marplatense.
“Se trazarán todas las estrategias políticas de gestión para defender el laburo y que lo que plantean estos artículos de la ley no suceda”, completó el secretario de Desarrollo Local e inversiones.